¿Busca algo diferente? ¿Algo versátil que llame la atención en su carta? Los tuétanos se puede servir como atractivos huesos, o bien, puede raspar la tierna médula asada y servirla en un ramequín, o incluso agregarla a salsas, mantequillas y mucho más. De rienda suelta a su creatividad, sirviéndola con mermelada de tocino o bruschetta al romero, y logrará una entrada que convertirá a su establecimiento en un destino obligado para los comensales.
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